Es increíble ver en estos días la vía férrea que atraviesa a Usaquén, aquel Tren que algún día trajo el progreso a la Localidad hoy es un lugar inseguro y descuidado, donde rondan los ladronzuelos y vamos a botar lo que no nos sirve.
Me pregunto cómo se verá la carrilera desde el Tren, ¿Será que desde adentro no se alcanza ver la basura sobre la vía o no nos sentimos intimidados frente a la presencia de personas de poco fiar? Nunca he tomado el Tren Turístico de la Sabana que atraviesa la Localidad y la mayoría de los habitantes de Usaquén tampoco han participado de esta experiencia.
Estación de San Antonio Calle 180 con Avenida Novena |
Queriendo romper la brecha entre el Tren capaz de recorrer este tramo cada fin de semana, llamé a algunos jóvenes que he conocido de la Localidad y los invité a acompañarme a viajar por la vía férrea, pero esta vez no en tren sino en bici, desde donde si se siente la amenaza de la inseguridad y se ve la basura que afea nuestro plan turístico de domingo.
Nos vimos un domingo en la Estación del Tren de Usaquén y desde ese punto salimos a rodar sobre toda la vía férrea. Ese día llegaron todos los jóvenes que habían sido invitados: María José y Santiago, gestores culturales del grupo Casa Entrecomillas y quienes viven o han vivido varios años por la Localidad; Yako y Harvey, raperos del barrio El Codito; además de Ariel y Andrés, compañeros de la Universidad que viven en Cedritos.
La idea era saber que percepción tenían ellos sobre la carrilera y su entorno a medida que avanzábamos y dialogar acerca de los espacios que tienen o no los jóvenes como actores sociales y la falta de garantías para incluirlos como importantes en la creación de desarrollo y sociedad. Además, descubrir lugares que posiblemente pudieran ser interesantes para intervenir más adelante con sus proyectos o ideas de arte.
Comenzamos la ruta tomando “La Ciclovía” desde el puente de la calle 116, el cual nos llamó la atención por ser un lugar en el cual nadie quiere estar, pues es oscuro, huele feo y es inseguro. Al seguir derecho hicimos un stop en el Parque Cedritos, vimos futbol, un grupo de Capoeira y chicos en las rampas montando tabla, patines y bicis, nos gustó la dinámica cultural y sana del lugar.
Estación del Tren de Usaquén - Calle 116 con Avenida Novena En frente Centro Comercial Santa Ana. |
A pesar de haber considerado que en un principio los jóvenes sentían un rechazo por parte de la población adulta al no ser considerados como actores sociales importantes en su comunidad, ellos al contrario no se consideran excluidos, sino diferentes. Creen que hay una gran brecha entre ellos y los adultos porque no los conocen, no saben qué es lo que hacen, qué música les gusta, a qué fiestas van, qué hacen por Internet o qué hablan con sus amigos y es por esta razón que los consideran distantes.
Picnic en Parque de la 182 |
Tienen una visión muy diferente a los esquemas que plantea el sistema, los critican y muchos han tomado alternativas de acción para escapar de ahí. Se consideran muy inteligentes y productivos en la sociedad, solo que ésta enmarcada en un sistema determinado, no puede ver sus productos por estar al tanto de la imagen que muestran (el cabello largo, los piercing, los tennis).
Por otro lado, no demuestran ningún tipo de credibilidad y confianza hacia los medios, creen que son culpables de hacer más grande esa brecha entre las generaciones, creen que tergiversan la información y que muestran una visión de mundo que no concuerda con la realidad. Además, sin importar la clase socio-económica a la que pertenezcan, se sienten intimidados o excluidos del mundo relacionado con el consumo, como lo son los sitios de fiesta o los centros comerciales, lugares en donde sienten que las personas no se comportan como ellas mismas y están obligados a asumir un rol social falso para poder hacer parte de ese contexto. Entonces, consideran que más que el dinero es el consumo y los imaginarios que plantea el mercado, los medios y la publicidad; lo que separa y excluye a las personas.
Sin embargo, ellos han dejado muy en claro su posición, se consideran muy importantes como actores sociales, pues representan y son la voz de muchos otros jóvenes, no se conforman con lo que viven, constantemente tienen grandes ideas y analizan y argumentan los comportamientos de la sociedad misma buscando darle una razón a ciertas actitudes y realidades de la vida. Sin embargo, son conscientes que la disciplina y la responsabilidad es su talón de Aquiles.
Nos levantamos del parque y seguimos el norte, en la calle 189 se divisaba El Codito en la loma, Jacko y Harvey se despidieron junto con sus hijos quienes nos acompañaron durante todo el recorrido. El resto seguimos la ruta al norte para terminar rondando el Cementerio Jardines de Paz por un rato. En medio de la muerte, me vi rodeada de vida, supe que las juventudes no estábamos perdidas, que aún muchos no estaban de acuerdo con el mundo que vivimos y ya están tomando miles de represalias para revertirlo.